Glaucoma: el silencioso ladrón de la vista. Todo lo que debes saber
El glaucoma es conocido como el "silencioso ladrón de la vista" porque no produce síntomas en su etapa temprana. Por eso debes estar bien informado
Glaucoma: todo lo que debes saber
Para conocer el tema en profundidad, se debe comenzar por explicar qué es el glaucoma . Pues bien, se trata de una patología oftálmica que contribuye al deterioro del nervio óptico. Esto se resume en la pérdida parcial de la visión e, incluso, ceguera.
Suele producirse de forma asintomática al comienzo , de manera que, para cuando la persona siente incomodidades o dolores, la enfermedad ya se encuentra muy avanzada. Ese es el peligro del glaucoma. Cabe mencionar que se trata de una enfermedad cuyos efectos son irreversibles, por lo que conviene mantenerse informado sobre las causas, prevenciones y tratamiento.
Y es por esa razón que aquí te damos la información necesaria para conocer más a fondo sobre este tema, así como compartimos algunos tratamientos y consejos para identificarla de manera temprana. ¡No te pierdas esta importante información!
¿Por qué se presenta el glaucoma?
La principal causa que sobreviene al deterioro del nervio óptico es generada por la presión intraocular que, al elevarse, produce una obstrucción del sistema de drenaje del fluido intraocular. Si este líquido llega a acumularse, comienza a presionar el interior del ojo, causando daños en el nervio óptico y, por ende, la pérdida total y progresiva de la visión.
Si no hay síntomas, ¿cómo identificarla?
Como se ha mencionado, el glaucoma es silencioso en sus etapas tempranas, pero hay maneras de identificar su aparición. ¡Atento!
La visión lateral , conocida como periférica, suele ser la principal afectada. Esto quiere decir que el cambio en la visión no se identifica de manera inicial porque no está afectando la visión central. Así, las constantes visitas a tu oftalmólogo pueden salvar tu vista.
Desde luego, existen diferentes tipos, como por ejemplo, el glaucoma de ángulo cerrado agudo que sí presenta algunos síntomas, como son dolor de ojo, náuseas, vómitos, visión borrosa y halos de luces.
¿Qué estudios se realizan para detectarlo?
Tu oftalmólogo realizará diversas pruebas para identificar el desarrollo de esta enfermedad, además de exámenes, entre los que podemos encontrar los siguientes.
- Prueba de agudeza visual. Para esta prueba se requiere una tabla optométrica con la que medirán tu vista desde diferentes distancias.
- Examen de dilatación de pupilas. El oculista colocará unas gotas en tus ojos con la finalidad de dilatar tus pupilas. De este modo, le será más sencillo observar el nervio óptico y la retina con la ayuda de un lente de aumento especialmente diseñado para ello. Así podrá identificar señales de daños, lesiones u otros problemas.
- Prueba de campo visual. En esta prueba se mide la visión lateral o periférica. Es, quizás, de las más significativas, ya que examina la visión lateral, que es la principal afectada por el glaucoma .
- Tonometría. Se hace uso de un tonómetro , el cual ayuda a registrar los niveles de presión intraocular. Una prueba que no debe faltar si se sospecha de glaucoma o se intenta prevenirlo.
- Paquimetría. El oftalmólogo aplica ondas ultrasónicas al ojo, previamente sedado, con la finalidad de medir la densidad total de la córnea.
¿Cuándo acudir al oftalmologo?
Existen algunos factores de riesgo que podrían hacerte más susceptible de padecer de glaucoma , por lo que se te recomienda que acudas a tu oftalmólogo con mayor frecuencia si:
- tienes más de 60 años;
- existen antecedentes familiares de la presencia de esta enfermedad;
- padeces de diabetes;
- tienes ascendencia africana, latina, hispana o asiática;
- sufres de miopía;
- haces o has hecho uso de esteroides durante un largo periodo de tiempo.
Si ya te han diagnosticado a ti o a alguien cercano de glaucoma, debes saber que, a pesar de que no existe una cura para esta enfermedad, sí que hay algunos métodos y herramientas de las que puedes valerte para mejorar tu calidad de vida o la de tus seres queridos.
Una de ellas son las gotas oftálmicas, que ayudan a reducir los dolores y las molestias ocasionadas por la alta presión ocular; medicación oral y, desde luego, la cirugía.
Recuerda que debes acudir siempre a los mejores especialistas, como a profesionales como el doctor Enrique A. Alvarado , quien es un reconocido cirujano oftalmólogo glaucoma y segmento anterior, certificado por el Consejo Mexicano de Oftalmología y presidente del Colegio de Oftalmología de Nuevo León 2018.
Nunca dejes la salud de tus ojos en manos inexpertas que no sabrán orientarte de la manera que tú necesitas. Cada vez que visites a tu oftalmólogo, no olvides preguntarle sobre las mejores maneras de prevenir esta y otras enfermedades oculares y, si ya padeces de alguna, cuáles son los mejores tratamientos y las opciones que se encuentran a tu alcance para tener una mejor calidad de vida.
El especialista siempre estará ahí para resolver tus dudas y darte la mejor asesoría para el bienestar de tu salud y de tu visión. La diferencia de ponerte en manos expertas podría salvarte de padecer una enfermedad irreversible.
¿Cómo prevenir?
De acuerdo a un reciente estudio europeo, se ha detectado que el ejercicio es perfecto para la prevención de esta enfermedad. Realizar actividades deportivas de modo constante, resulta de gran ayuda para reducir los altos índices de presión intraocular.
De igual modo, se ha demostrado que evitar el tabaquismo, mantener una dieta sana y variada, así como cuidar y mantener un peso saludable de acuerdo a la altura de cada individuo, disminuyen considerablemente los factores de riesgo que pueden conducir a padecer de esta grave enfermedad y, no solo esta, sino numerosas afecciones que están relacionadas con la salud visual.
De tal manera que puede ser una estupenda idea el pensar en cambiar los hábitos que te mantienen en riesgo de perder la visión de manera progresiva o padecer otras enfermedades.
Recuerda que las constantes visitas a tu oftalmólogo son imprescindibles para mantener tu vista en óptimas condiciones. Nunca debes esperar a que se presenten síntomas, dolores o incomodidades para decidir hacerte un chequeo general.
El glaucoma es una enfermedad irreversible que puede ser fácilmente evitada si cuentas con la información necesaria y tomas conciencia sobre las responsabilidades y consejos que aquí te ofrecemos. ¡No lo dejes para mañana!
